¡Buenos días!
¡Ya hemos recibido nuestro título de Passivhaus Designer! Estamos tan contentos de poder lucirlo que queremos aprovechar para hablaros un poco más de Passivhaus y de nuestro trabajo.
Este estándar de eficiencia se basa en cálculos energéticos precisos de la vivienda diseñada. El cumplimiento de unos estrictos requisitos constructivos, avalados por más de 20 años de estudios y controles de viviendas Passivhaus existentes, garantiza una construcción de máxima eficiencia y confort y mínimo consumo.
Pero, ¿cómo funciona Passivhaus?
Un rápido símil: una construcción convencional es una cafetera
Una cafetera pierde calor por el material poco aislado y para mantenerla caliente es necesario transmitirle continuamente energía, sino el café se enfría rápidamente. Esa energía tiene un coste; si hablamos de una vivienda ese coste es enorme. Enorme económicamente para el bolsillo del propietario y enorme medioambientalmente para el planeta.
Además, esta construcción convencional no solo pierde calor (o frío en verano, cuando fuera hace más calor) a través de los muros mal aislados sino que también pierde aire por muchas juntas mal realizadas. No hay más que poner la llama de un mechero en el borde de una ventana.
RESUMEN. El habitante o usuario de una construcción tradicional, además de gastar continuamente energía en climatizar, está incómodo: variaciones de temperatura, flujos de aire, pies fríos, frío al lado de las ventanas y más problemas que todos hemos vivido. El planeta se ve muy perjudicado: a más consumo más gases de efecto invernadero, aumento de las temperaturas y más problemas que todos conocemos o deberíamos conocer.
Un rápido símil: una construcción Passivhaus es un termo
Un termo no pierde prácticamente calor ni por el material ni por fugas, está aislado y es hermético, y el café se mantiene caliente sin necesidad de aporte externo de energía. Basta un pequeño aporte puntual para que el café se mantenga caliente siempre. De la misma manera, ese coste de consumo de energía en una construcción Passivhaus es mínimo, pudiendo reducirse hasta en un 90%. Además, al ser hermética como el termo, no tiene fugas de aire: el calor (en invierno) y el frío (en verano) se mantienen en el interior, el aire exterior no aclimatado no entra.
RESUMEN. El habitante o usuario de una Passivhaus, además de no gastar casi energía en climatizar, está cómodo: sin variaciones de temperatura, sin flujos de aire, sin pies fríos, sin frío al lado de las ventanas, otra forma de vivir. El planeta se ve muy beneficiado: sin casi consumo reducimos los gases de efecto invernadero y apostamos la lucha contra el cambio climático y el futuro.
¿Por qué invertir en una vivienda/edificacion eficiente?
Como hemos visto, una edificación Passivhaus no solo proporciona el máximo confort sino que reduce hasta un 90% el consumo de energía, ahorrando mucho dinero y favoreciendo al medioambiente. La pregunta entonces es ¿por qué no invertir en una edificación eficiente?
Es cierto, una Passivhaus es un 10-20% más cara que una construcción convencional de una mínima calidad. Sin embargo, el enorme ahorro que proporciona a lo largo de toda la vida útil de una vivienda (por encima de 50 años) no solo compensa el sobrecoste, sino que convierte una construcción Passivhaus en una inversión más rentable a largo plazo que una construcción convencional. Además, si consideramos que la tendencia del precio de la energía es a subir y el de los componentes Passivhaus a bajar, el ahorro es todavía mayor.
Si, una vivienda Passivhaus es realmente más barata.
En UNO100 apostamos por Passivhaus y todos sus beneficios
En UNO100 apostamos por todos los beneficios de Passivhaus. Sin embargo, entendemos que algunos clientes no puedan permitirse, por su situación, esta sobreinversión. Por eso, hacemos proyectos energéticamente eficientes dentro de las posibilidades o necesidades de cada cliente, convergiendo siempre hacia Passivhaus.
La normativa española prevee obligar a partir de 2019 (2021 para obra privada) a que las nuevas construcciones sean de Consumo Casi Nulo, un estándar que toma como referencia a Passivhaus. No sabemos si cumplirán sus plazos pero, lo que sí es seguro, es que el cambio está a la vuelta de la esquina y es lo mejor para todos.
Por último, una imagen termográfica vale más que mil palabras. Sabiendo que los colores vivos corresponden a las temperaturas más altas. ¿Cúal pierde más energía, una cafetera o un termo?
¿Cuál es la única vivienda Passivhaus y cuáles no paran de perder energía (y contaminar, perder dinero, vivir con menos confort…)?
¡Para saber más visita nuestra sección de Passivhaus o contáctanos!