Buenos días a todos,
Estas semanas está teniendo lugar, de forma telemática, la 12º Conferencia Española de Passivhaus.
Como seguramente ya sabéis, si seguís nuestros posts y publicaciones, Passivhaus es el estándar de eficiencia energética más exigente e implantado a nivel internacional. Diseñando según estos criterios, conseguimos las edificaciones más sostenibles, confortables y con menor coste de climatización (consumo casi nulo).
Rehabilitación energética. ¿Por qué?
La jornada de apertura se centró en la rehabilitación energética, lo que en el estándar Passivhaus se llama Enerphit y consiste en reformar el parque edificatorio existente para conseguir esa misma sostenibilidad, confort y mínimo coste de climatización.
En el post de hoy nos gustaría traeros algunas reflexiones e información sobre rehabilitación energética que se dieron en la jornada.
Actualizar estas edificaciones es de vital importancia a nivel económico y medioambiental. La gran mayoría de las viviendas existentes fueron construidas antes de la aparición del código técnico de la edificación (mínimos a cumplir por normativa) y no contemplan criterios de eficiencia. Además, desde su aparición, estos criterios de eficiencia se han vuelto mucho más restrictivos, haciendo que las viviendas de 2018 ya se consideren obsoletas después de la modificación del CTE del año pasado. Para hacernos una idea de magnitud, el 80% de las edificaciones tienen una calificación energética por debajo de la D (muy ineficientes).
Apostar hoy por Passivhaus (o alta eficiencia energética, muy por encima de los mínimos del código técnico), ya sea en obra nueva o en rehabilitación energética, asegura que, cuando cambie de nuevo la normativa dentro de 4 o 5 años, las viviendas recientemente construidas no se queden obsoletas.
Rehabilitación energética. ¿Cómo?
La rehabilitación energética debe ser, en la medida de lo posible, integral. Al igual que si se tratara de un proyecto de nueva construcción, la rehabilitación debe trabajar el edificio en su conjunto. Por ejemplo, un error típico es cambiar las ventanas antiguas con filtraciones de aire por unas ventanas nuevas “de calidad”. Esto tiene dos efectos negativos que, a priori, nadie contempla.
Uno. Si la ventana es de calidad pero no está colocada en continuidad con el aislamiento térmico o las fachadas no están correctamente aisladas, estamos invirtiendo en calidad en balde. Dos. Las filtraciones de las ventanas antiguas, aunque negativas a efectos de eficiencia energética, ayudaban a ventilar naturalmente la vivienda. Si las nuevas ventanas no tienen fugas (como debe ser), corremos el riesgo de que se acumule humedad y aparezca moho donde antes no lo había. Una alternativa es recurrir a ventanas con sistemas de ventilación natural pero, aunque controladas, volvemos a tener fugas.
¿Qué sería lo correcto de cara a la rehabilitación energética? Instalar, además de las nuevas ventanas, un sistema de ventilación mecánica de doble flujo con recuperador de calor, que mantiene la casa en condiciones óptimas de salubridad sin perder apenas energía por ventilación. Una rehabilitación integral consigue los mejores resultados a nivel de confort y ahorro en climatización, haciendo además que la rehabilitación se amortice en unos años, mucho más rápido que haciendo una rehabilitación energética parcial tras otra con el tiempo.
Rehabilitación energética. ¿Cuánto?
El precio de la rehabilitación energética es muy variable, según las condiciones del edificio. Lo que es seguro, es que se trata de una inversión muy rentable, a nivel de confort desde el minuto cero y a nivel económico a medio y largo plazo.
El problema suele ser que no tenemos ese dinero inicial que invertir (aunque, repito, lo vamos a recuperar con creces en el futuro en ahorro de climatización). Para que eso no suponga un freno, en la conferencia Passivhaus presentaron las ayudas PREE del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) que subvencionan a fondo perdido la rehabilitación energética de edificaciones existentes en España, con varias tipologías de actuación posibles: envolvente térmica, energías renovables e iluminación. En la web encontraréis un cuestionario guiado que os permitirá calcular, según la intervención que os planteáis llevar a cabo, la cuantía de ayuda a la que optáis. Podéis solicitar la ayuda hasta el 31 de Julio de 2021.
Ya no hay excusa. Muchas comunidades autónomas (entre otras, País Vasco, Navarra, Aragón, Castilla-La-Mancha…) están apostado ya por Passivhaus y Enerphit, no solo a nivel privado sino también a nivel institucional (público) porque se han dado cuenta de los grandes beneficios económicos, medioambientales y de confort que implica. ¡Os animamos a dar el paso, no os arrepentiréis!
Para solicitudes y más información, podéis visitar la web de las ayudas PREE a la rehabilitación energética:
Para más dudas: Ciudadanos@idae.es
Deja una respuesta