RESIDENCIAL ÁGORA
Tipo
Arquitectura (obra nueva)
Localización
Torre Pacheco
Superficie
3700 m2
Estado
En proyecto

El residencial Ágora, situado en el centro de Torre Pacheco, busca replantear la estética imperante en el lugar, dibujando líneas modernas con materiales tradicionales. La fachada es una piel de ladrillo visto que se pliega sucesivamente para abrir terrazas a todas las viviendas, conformando celosías que tamizan el sol y dan privacidad. Las terrazas se proyectan al exterior con jardineras metálicas negras que visten la fachada cerámica de vegetación.

Las 36 viviendas, amplias y muy funcionales, integran estar, comedor y cocina en un único espacio diáfano, con grandes ventanas y pasante de la fachada interior a la exterior. Con ello, se permite la ventilación natural cruzada y una buena iluminación para conseguir el máximo confort. En el interior, se trabaja un estilo nórdico, que combina la limpieza del blanco con la calidez de la madera en el suelo y en nichos que se abren puntualmente en los muebles panelados.



Dos distribuidores cubiertos, uno a cada lado del patio central, dan acceso a las viviendas en cada planta. Las terrazas interiores privadas se abren parcialmente al patio, favoreciendo la convivencia vecinal, pero conservan cierta privacidad y protección solar gracias a un sistema de lamas.


El patio comunitario, al que vuelcan todas las terrazas interiores de las viviendas, se ha diseñado como un jardín interior tranquilo para todos los vecinos. Se distribuye mediante las mismas jardineras metálicas que brotan de la fachada, creando en el jardín rincones de relación y espacios más abiertos a la sombra de la vegetación. El fondo del jardín se eleva ligeramente con una plataforma a dos niveles que permite su uso como graderío, enriqueciendo los usos y espacios del jardín.



El patio cuenta con varias salas comunitarias, que se extienden a la cubierta con dos salas más, con espacios cubiertos adyacentes y amplias terrazas – solárium vegetalizadas. Los balcones de las terrazas de las viviendas se proyectan también hacia la calle en la cubierta, creando pequeños miradores más privados.
